Y el cauce del Rímac creció, creció tanto en 1607 que destruyó la rústica infraestructura del puente de madera que cruzaba el llamado “río hablador”. Era el momento de reemplazarlo por una vía más confiable y moderna.

Así lo hizo el virrey Juan de Mendoza y Luna, marqués de Montesclaro, quien ordenó la construcción del centenario puente de Piedra de Lima en 1608. Diseñado por el maestro español Juan del Corral, la obra fue inaugurado en 1610.

Desde ese momento el puente Viejo o puente Trujillo, como también se le conoce, une el Centro Histórico con el distrito del Rímac. Hecho con piedras y calicanto, resaltan sus cinco arcos tallados en cantería de inspiración sevillana.

Pasos de tradición en un jirón que debes recorrer con calma para sentir el palpitar centenario del Centro Histórico. Sí, sin prisas entre sus construcciones antiguas, sus galerías comerciales y las sorprendentes rutinas de los artistas callejeros.

En la colonia las familias adineradas se asentaron en las 11 cuadras de esta calle. Su cariz cambiaría en la época republicana, convirtiéndose en un lugar animado con teatros, restaurantes y cafés que atraían a la intelectualidad de aquellos tiempos.

En 1862 surgiría la denominación jirón de la Unión y en 1982 se convertiría en una vía peatonal entre las plazas de Armas y San Martín. Durante el recorrido anímate a probar algunas delicias limeñas, como los anticuchos y los picarones.

Es el centro de la Lima republicana. Inaugurada en 1921 para honrar la memoria del libertador José de San Martín y conmemorar el centenario de la independencia, la plaza se ha convertido en un lugar de debate político y de manifestaciones populares.

Un monumento ecuestre del general San Martín hermosea la plaza. La obra del español Mariano Benlliure, armoniza con las líneas Art Nouveau, Neoclásicas y Art Deco, entre otras influencias, de los edificios que rodean este espacio urbano.

Al terminar el recorrido abordarás un taxi en compañía de tu guía. Juntos se trasladarán al Circuito Mágico del Agua del parque de la Reserva. Tiempo estimado: 7 minutos. En el trayecto verás el estadio Nacional, la casa de la selección.

Las aguas de las fuentes del parque de la Reserva, declarado Patrimonio Cultural de la Región Andina, se “comportan” de manera distinta en el día y en la noche. La transformación es un espectáculo fabuloso que es el cierre perfecto del free tour.

Y es que, al ocultarse el sol, las aguas “despiertan”, se inquietan, saltan y hasta bailan al ritmo de la música y de la cambiante intensidad de los rayos láser. Un show único que incluye proyecciones de imágenes representativa de Lima y el Perú.

Inaugurado en 2007, las fuentes cibernéticas y de alta tecnologías del circuito, son únicas en el país y Sudamérica. Así que prepárate para vivir una experiencia que es exclusiva de Lima.

Una recomendación final: lleva una toalla y prendas para cambiarte.

Para que disfrutes al máximo del Circuito Mágico del Agua, el free tour termina en el parque de la Reserva, después de 3 h de recorrido por el Centro Histórico de Lima.

Al salir, pide un taxi de aplicación para trasladarte a tu hotel o alojamiento. Tu guía también te podrá asistir.